Expresividad, la cualidad de lo expresivo, o la fuerza expresiva,[1] es la manifestación con gran viveza de los sentimientos o pensamientos; especialmente en el arte, a través de todo tipo de manifestaciones de las formas o medios de expresión, cada una en su particular lenguaje: mímica, oral, escrita, musical o plástica.[2] En contextos artísticos, "medio de expresión" es el material (piedra, madera, arcilla, pigmentos) o la técnica (fresco, óleo, terracota, fundido en bronce) con la que un artista realiza su obra, el "vehículo" con el que se expresa.[3]
Expresar es manifestar de forma perceptible hacia el exterior lo que se encuentra en el interior (lo psíquico o anímico).[4] La condición de inexpresivo es la de lo que carece de expresión, que es incapaz de expresarse, o que no lo hace voluntariamente (por ejemplo, para ocultar las intenciones, como en la "cara de póker" -la expresión inescrutable que consigue el jugador a quien no se le nota la emoción que deberían producirle sus cartas-).[5] En contextos artísticos, la "expresión" es tanto la del artista que realiza la obra como la de la figura representada (en un arte figurativo) o de los propios rasgos de expresión más o menos acentuados de las propias formas artísticas.
Etimología
La etimología de "expresión" proviene de expressionem (expressio en nominativo), que en latín tardío significaba "viveza" y en latín clásico "prensado, proyección", construido a partir del participio pasado del verbo exprimere, literalmente "presionar, exprimir", con el sentido figurado de "representar, describir".[6]
Formas de expresión
Según la forma de lenguaje utilizado para la expresión se diferencian tipos o formas de expresión de la expresión artística, mediante el lenguaje artístico:
Éxtasis de Santa Teresa, de Gian Lorenzo Bernini, 1645, Roma, Italia. Retrata la imagen de Santa Teresa de Ávila durante el don místico de la transverberación
Un deseo de expresividad puede llevar a falsear las proporciones reales (Marc Saint-Saëns, Teseo y el Minotauro)[10]...
Por la alta expresividad que los arquitectos han sacado de la ojiva, el arco ojival es, de forma innegable, uno de los factores que más se impone de la imagen de la arquitectura gótica.
En el Renacimiento se teorizó acerca del decorum: cómo cada figura debe ser representada de forma apropiada a sus características, lo que incluye su atavío, su pose y su expresión, lo que puede asemejarse a cómo una representación teatral nos hace parecer verosímil un personaje. En la pintura medieval no era necesario individualizar las características de una figura, puesto que la iconografía proporcionaba recursos inequívocos, e incluso se rotulaban los nombres.
Expresión en otras actividades
Por su propia naturaleza, no hay campo de la actividad humana que no pueda ser vehículo para la expresión, con mayor o menor grado de creatividad (la cocina, la moda, la peluquería).
Expresión y comunicación
El propio lenguaje humano tiene una doble función: la expresión (en la que el protagonista es uno mismo) y la comunicación (en la que el protagonismo lo toma la relación con los otros).
El estilo tiene un valor expresivo; enriquece o realza el significado central de las oraciones y, al mismo tiempo, por la carga expresiva que transmite, determina la actitud del lector hacia lo que está pasando. Toda manifestación lingüística tiene una fuerza expresiva; símiles y metáforas, por ejemplo, no deben considerarse como meros adornos.
El movimiento tenso tiene una gran fuerza expresiva, que viene dada por la lucha entre los dos elementos gravedad y tensión, fuerza expresiva que se trasmite a los que lo ven, por lo que no es bueno abusar de su utilización. Esta gran fuerza expresiva es de sentido negativo, ya que al final vence la resultante gravedad sobre la ingravidez, a pesar de los esfuerzos. Por lo que, utilizado al final de un ejercicio, deja en el espectador un sentimiento trágico.
La fuerza expresiva de un relato autobiográfico es muy fuerte y puede ser la mejor defensa de una determinada tesis o la mejor ilustración de ideas complejas.
↑Real Academia Española. «expresividad». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).Real Academia Española. «expresión». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
↑"Para expresar todo este mundo de ideas... el artista de nuestro tiempo ha visto ampliado considerablemente el caudal de materiales que le son vehículo moldeable para canalizar su propia expresión. El pintor, que contaba con el patrimonio de las técnicas tradicionales, como el óleo, la acuarela, el gouache, el pastel, la témpera, la encáustica, etcétera, sobre superficies adecuadas como el papel, la tela, la madera o el metal, según la técnica propia ... (Josefina Alonso de Rodríguez, Arte contemporáneo: Ocidente--Guatemala, 1966).
↑Real Academia Española. «inexpresivo». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).Real Academia Española. «cara». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
↑ASL Resource Site, fuente citada en Manual communication. Kendon, Adam (2004). Gesture: Visible Action as Utterance. Cambridge: Cambridge University Press. ISBN 0-521-83525-9., fuente citada en List of gestures.
↑Real Academia Española. «cinésica». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).