Museo Dolores Olmedo
El Museo Dolores Olmedo Patiño se encuentra en Xochimilco, en el sur de la Ciudad de México, México. Lleva el nombre de la coleccionista Dolores Olmedo Patiño y se enfoca principalmente a la difusión de la obra de Diego Rivera y Frida Kahlo, resguarda un acervo de aproximadamente 3000 piezas, mismas que periódicamente son rotadas para su exhibición. El acervo del museo incluye aproximadamente 600 piezas prehispánicas procedentes de culturas mesoamericanas, como la olmeca, la mixteca, la zapoteca, la totonaca, la maya, la azteca y de las asentadas en la región de Occidente de México. [1] Cuenta con el atractivo adicional de los pavorreales y xoloitzcuintles que pasean por sus patios.[2] Historia del inmuebleEl museo se encuentra dentro de la Finca La Noria, construcción que data del siglo XVII. Durante la época prehispánica, el lugar donde se ubicó la hacienda fue ocupado por un grupo xochimilca que le dio el nombre de Tzomolco, que en nahuatl significa cerro que se desgaja, asignado en función a la presencia del pequeño cerro en la parte posterior de la construcción. En el Tzomolco se realizaron varias ceremonias del Fuego Nuevo, un ritual prehispánico a celebrarse cada 52 años que festejaba el renacimiento del sol y la vida. Posteriormente, en este lugar se estableció Apochquiyauhtzin, el último rey xochimilca. Los orígenes de la Finca la Noria datan del siglo XVI, aunque partes importantes se fueron agregando al conjunto durante los siglos XVII, XVIII y XX. La información registrada menciona que el uso original de esta fue agrícola y que se conoció con el nombre de Rancho de San Juan La Noria. Destaca la Capilla de San Juan Evangelista Tzomolco, una pequeña construcción de uso doméstico, de la cual sólo se conserva la estructura arquitectónica, registrada como monumento histórico.[3] El museo abrió sus puertas por primera vez el 17 de septiembre de 1994. Historia del museoFue fundado por María de los Dolores Olmedo y Patiño Suárez, nacida en Tacubaya, Ciudad de México en 1908, quien estudió leyes y terminó cursando una carrera artística en la Academia de San Carlos. Dolores convivió con intelectuales de la época como Salvador Novo, Javier Villaurrutia y Jaime Torres Bodet, entre otros, y en particular con el pintor Diego Rivera.[4] Dolores Olmedo Patiño entró en contacto con el coleccionismo gracias a la amistad que tenía con Diego Rivera. Después de la muerte de Diego y de su esposa Frida Kahlo, Dolores quedó a cargo de las obras de la pareja. Con el fin de no dejar que sus obras murieran con los autores, gestionó y logró montar exposiciones dentro y fuera de México. Para 1957, Dolores Olmedo tenía ya 50 obras de Diego Rivera y para 1972 había coleccionado más de 800 piezas arqueológicas mesoamericanas. Es en 1962 cuando adquiere la hacienda de La Noria, lugar completamente restaurado para que ella lo adecuara según sus necesidades y así, convertirlo en su nuevo hogar. Al restaurar el casco de la hacienda y recuperar en gran parte su aspecto original, se logró revivir un ejemplo más de la arquitectura clásica, que se desarrolló durante la época colonial. Se conservó el sistema constructivo original con el que fue edificado el casco: techos de terrado y viguería, muros mixtos, pisos de duela y ladrillo, aplanados en muros y bóvedas, además de contrafuertes propios de la época, respetando también dentro de los acabados las portadas en fachada revocadas en cantera. En 1994 abrió su casa al público como Museo Dolores Olmedo exponiendo toda su colección artística.[4] Las 139 obras de Rivera con las que cuenta el museo fueron reunidas bajo la supervisión del propio pintor. Un par de obras que se exponen tienen a Dolores Olmedo al desnudo, pinturas que causaron descontento con su entonces esposo, Howard Phillips, quién pidió a Dolores que las devolviera al autor ya que no creía en "su buena fe". Pese a esto, la amistad entre ellos dos perduró hasta la muerte de Diego. La colecciónEl museo cuenta con 139 trabajos de Diego Rivera y 25 obras de Frida Kahlo, lo que lo convierte en la colección más grande en México de las obras de ambos.[5] También cuenta con 43 creaciones de Angelina Beloff, varias de Pablo O’Higgins, arte popular mexicano y más de 600 piezas de arte prehispánico.[6] [7] Entre las corrientes principales que se encuentran en el museo están: cubismo, post-impresionismo, primitivismo, simbolismo, surrealismo, realismo mágico y realismo social.[8] Las salasLa colección se ha dividido en diversas salas, que siguen un orden numérico:
El museo está rodeado por un espacio ecológico en el que se conservan más de 20 especies de árboles y plantas mexicanos, animales como pavos reales, gansos, patos, guajolotes y perros xoloitzcuintles.
Referencias
Enlaces externos
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