Lactarius deliciosus
El mízcalo,[2] níscalo,[3] robellon,[4] rebellón,[5] de nombre científico Lactarius deliciosus, es un hongo basidiomiceto comestible, de la familia Russulaceae. Es muy común en España y en Argentina, crece en pinares y bosques mixtos. Su seta o cuerpo fructífero aflora en otoño, y es muy apreciada en gastronomía. El basónimo de esta especie es Agaricus deliciosus L. 1753.[1] El epíteto específico, deliciosus, significa «delicioso».[3] CaracterísticasSu pie es ahuecado y corto, más o menos cilíndrico o estrechado un poco en la base. De estructura granulosa: macizo de muy joven, después tiene zonas huecas sin dejar de ser resistente. Es del color del sombrero pero más pálido, con algunos hoyitos superficiales de color más intenso. Suele tener parásitos y entonces se hace frágil. El sombrero suele oscilar entre los 4 y 16 cm de diámetro y su color anaranjado se ve modificado por círculos concéntricos de tonos rojizos y pálidos. En su juventud el sombrero se encuentra enrollado por sus bordes y conforme envejece se aplana para evolucionar a forma embudada. Las láminas de la cara interna son del mismo color, apretadas, finas y decurrentes. Su carne es densa y compacta, con olor suave y dulzón, el sabor en crudo es algo amargoso al final. Al corte desprende un látex de color naranja. Se oxida rápidamente, adquiriendo un color verdoso cardenillo cuando envejece o al pasar algunas horas de su recolección. Uno de sus colorantes se elimina por el riñón después de haberla comido;
La distinta valoración con respecto a su calidad culinaria puede deberse a que su sabor varía con el terreno donde crece, o a que muchas veces se toman por níscalos otras especies muy parecidas o se aprovechan ejemplares con muchas zonas de color verdoso por ser viejos, estar maltratados o, lo más frecuente, que están o estuvieron parasitados. HábitatVive formando micorrizas con diversas coníferas, especialmente del género Pinus. RecolecciónPara la recolección de esta seta u hongo se utiliza navaja con la que se corta el tallo.También es necesario usar una cesta de mimbre o similar porque no está permitido usar bolsas de plástico ya que las esporas no caerían y se podrían extinguir.[6] ComestibilidadLa seta de Lactarius deliciosus es un comestible apreciado. A menudo es consumida asada, guisada, en conserva (escabeche) o como complemento de los guisos de carne. Otros nombres comunesSe le conoce por otros muchos variados nombres dependiendo de la región geográfica:
Posibles confusionesSe puede confundir con el falso níscalo (Lactarius torminosus), también con el comestible y muy apreciado Lactarius sanguifluus (sombrero de color más apagado y látex color rojizo). CulturaUn fresco de la ciudad romana de Herculano parece representar a Lactarius Deliciosus y es una de las primeras obras de arte que ilustran un hongo.[7] Referencias
Bibliografía
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